Pueblos indígenas de Centroamérica excluidos de conversatorio sobre gobernanza forestal

Escrito en 08 Julio 2013. Publicado en Archivo de noticias

La Comisión Ejecutiva de la Alianza Mesoamericana de Pueblos y Bosques (AMPB), expresó su preocupación por la exclusión de los líderes de los Pueblos Indígenas de Panamá y Centroamérica, en el Conversatorio Regional sobre Gobernanza Forestal, convocado para mañana (9 de julio) por el Programa REDD-CCAD/GIZ.

De acuerdo con los organizadores del evento, este tiene como objetivo identificar los retos de una buena gobernanza de los ecosistemas forestales, para de garantizar la sostenibilidad de las actividades productivas rurales y los servicios ecosistémicos que estos generan. El diálogo ha sido siempre un método privilegiado para la construcción de visiones compartidas, su calidad y resultados guardan relación con la capacidad de involucrar al grupo social que mejor exprese los diferentes intereses relacionados con el tema de preocupación que lo justifica. Por esto, cabe preguntarse, ¿cómo alcanzar un diálogo de calidad, si algunos de los protagonistas principales, han sido excluidos? Los actores de la gobernanza forestal en Panamá Un excelente escenario para este diálogo es Panamá, uno de los países con mayor superficie bajo el control de Pueblos Indígenas. Según Vergara-Asenjo y Potvin (2013)[1], los territorios indígenas establecidos en este país (Comarcas y Tierras Colectivas), abarcan 23,742 km², una superficie mayor al territorio nacional de El Salvador; lo cual representa el 31.6% del territorio panameño. Estos mismos investigadores encontraron que los bosques maduros de Panamá, en su gran mayoría se encuentran dentro de los territorios indígenas y en áreas protegidas, que en su conjunto representan el 77% del total de los bosques maduros de Panamá en 2008. Aproximadamente 725,000 hectáreas de bosque maduro están ubicados en áreas protegidas, mientras 1,754,000 hectáreas están en territorios indígenas. Según esta misma fuente, en los territorios indígenas se encuentra el 54% de los bosques maduros de Panamá y el 54% de las reservas forestales de carbono. Además Panamá cuenta con un régimen legal de territorios indígenas, el cual es considerado como uno de los más avanzados a nivel internacional, en materia de derechos territoriales. La Alianza Mesoamericana de Pueblos y Bosques, entiende la gobernanza como el conjunto de condiciones que se generan cuando la titularidad de la propiedad de las tierras forestales es clara y respetada; cuando existen normas de acceso y uso de los recursos naturales e instituciones capaces de velar por su correcto funcionamiento. Estas condiciones son un atributo de las Comarcas Indígenas y de las llamadas Tierras Colectivas en Panamá, lo que convierte a las autoridades indígenas en un actor de primera línea en los diálogos sobre deforestación evitada y gestión sostenible de los bosques en este país. Contacto para periodistas y editores Fabio Víquez Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. [1] Fuente: Vergara-Asenjo y Potvin (por publicar). Citado por PRISMA 2013.

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