El Mundo Indígena 2022: Namibia
Entre los pueblos indígenas de Namibia se encuentran los San, los Ovatue y los Ovatjimba, y posiblemente otros como los Damara y los Nama. En conjunto, los pueblos indígenas de Namibia representan alrededor del 8 % de la población total del país, que era de 2.678.191 personas en 2021. Los San (bosquimanos) son entre 28.000 y 35.000 y representan entre el 1.045 % y el 1.33 % de la población nacional. Entre ellos se encuentran los Khwe, los Hai||om, los Ju|’hoansi, los !Kung, los !Xun, los Naro y los !Xóõ. Cada uno de los grupos San habla su propia lengua y tiene costumbres, tradiciones e historias distintas. En el pasado, los San eran principalmente cazadores-recolectores, pero hoy en día muchos tienen medios de subsistencia diversificados. Más del 80 % han sido despojados de sus tierras y recursos ancestrales y ahora son uno de los pueblos más pobres y marginados del país. Los Ovatjimba y los Ovatue (Ovatuwa) son pueblos mayoritariamente pastores, que antiguamente también se dedicaban a la caza y la recolección y que actualmente residen en el noroeste semiárido y montañoso de Namibia (la región de Kunene). En conjunto, suman unos 27.810 habitantes, es decir el 1.03 % de la población total del país.
El Gobierno de Namibia prefiere utilizar el término “comunidades marginadas” para referirse a los San, los Otavue y los Ovatjimba, cuyo apoyo es responsabilidad de la presidencia en la División de Comunidades Marginadas (DMC). La Constitución de Namibia prohíbe la discriminación por motivos de autoidentificación étnica o tribal, pero no reconoce específicamente los derechos de los pueblos indígenas. Namibia votó a favor de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas cuando se adoptó en 2007, pero no ha ratificado el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo. Namibia es signataria de otros acuerdos internacionales vinculantes que reafirman las normas descritas en la Declaración, como la Carta Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, la Convención sobre los Derechos del Niño, la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Namibia presentó un informe intermedio al Examen Periódico Universal del Consejo de Derechos Humanos en 2021.
El COVID-19 y los pueblos indígenas en Namibia
En 2021 hubo una serie de acontecimientos importantes que afectaron a los pueblos indígenas y marginados en Namibia. El más importante de ellos fue la pandemia de COVID-19, que condujo a una serie de confinamientos en el país. Esta situación redujo la propagación de la enfermedad pero también afectó los medios de subsistencia, el empleo, los ingresos y el turismo, así como una reducción del bienestar de los namibios, incluidas las personas que se autoidentifican como pueblos indígenas. Las mujeres indígenas, en particular, se vieron afectadas por el COVID-19, ya que son las principales cuidadoras de los enfermos, y el descenso del turismo afectó sus medios de subsistencia. El Gobierno de Namibia y las ONG organizaron labores de asistencia alimentaria y de agua para las comunidades marginadas afectadas por la pandemia. Se proporcionó información en lenguas maternas sobre las estrategias para hacer frente al COVID-19, las cuales incluían el uso de mascarillas, el distanciamiento social y el lavado de manos, como se vio, por ejemplo entre los Ju/’hoansi en Nyae, los !Kung en N≠a Jaqna, los Khwe en el Parque Nacional de Bwabwata y entre las comunidades de los Ovahimba, los Ovatjimba, los Ovazemba y los Ovatue en la región de Kunene[1]. El Ministerio de Salud y Servicios Sociales ofreció a los pueblos indígenas servicios de divulgación sobre la vacuna, pruebas y, en caso necesario, instalaciones de cuarentena.
Los discursos del ministro de Finanzas, Ipumbu Shiimi, el 17 de marzo de 2021 y el 3 de noviembre del mismo año, incluyeron cifras revisadas del presupuesto anual del país, que mostraban gastos nuevos e importantes relacionados con la pandemia[2]. El número de turistas que visitaron Namibia en 2021 disminuyó aproximadamente en un 40 % en comparación con el año anterior debido a la pandemia de COVID-19, lo que tuvo un impacto directo en los ingresos del turismo de la comunidad y un impacto indirecto debido a la gran caída de los ingresos en todo el sector.
Los retos a los que se enfrentan las mujeres y los jóvenes indígenas
Diversas organizaciones de mujeres en Namibia, entre ellas la Asociación de Mujeres de Namibia y el Ministerio de Igualdad de Género, Erradicación de la Pobreza y Bienestar Social, han presionado para que se reconozcan más los derechos de las mujeres, incluidos sus derechos a la tierra y a la protección contra la explotación y el maltrato intrafamiliar. Desde el comienzo de la pandemia de COVID-19, las violaciones, el maltrato intrafamiliar y de menores han aumentado considerablemente. El Centro de Asistencia Jurídica y otras organizaciones, entre ellas la División de Comunidades Marginadas de la Oficina del Vicepresidente, piden que se preste mayor atención a los problemas a los que se enfrentan las mujeres y los niños indígenas y de grupos minoritarios, incluidas las cuestiones relacionadas con el maltrato y la discriminación. Las mujeres indígenas y de grupos minoritarios, y las mujeres en general, tuvieron dificultades a la hora de poseer tierras en Namibia en 2021[3].
Las mujeres y los jóvenes desempeñan un papel cada vez más importante en el movimiento indígena de Namibia, como puede verse en la composición de las organizaciones que tratan de promover los derechos de los indígenas y de las minorías.
En 2021, se prestó gran atención en el país a la transversalización de la perspectiva de género en las políticas y programas gubernamentales, incluidos los relacionados con los refugiados y los inmigrantes. Estos son especialmente importantes dado el alto porcentaje de mujeres que componen las poblaciones de refugiados, como puede verse, por ejemplo, en el campo de refugiados de Osire, al sur de Otjiwarongo.
Namibia también se ha esforzado en particular por garantizar la transversalización de la perspectiva de género en el Fondo Verde para el Clima y por asegurar que las cuestiones de género se incorporen en las convenciones y la legislación internacional sobre el cambio climático[4].
Las Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, UNICEF, el Fondo de los Pueblos del Kalahari y otros organismos de Namibia siguieron presionando para garantizar la disponibilidad de información sobre el COVID-19 a lo largo de 2021, junto con la de mascarillas, jabón y vacunas para las comunidades indígenas, minoritarias y otras de Namibia. Parte de esta información estaba dirigida específicamente a las mujeres indígenas quienes, junto con jóvenes indígenas, se mostraron satisfechos de contar con información sobre las experiencias relacionadas con el COVID-19 de comunidades indígenas en otras partes del mundo, de las que podrían aprender[5]. Esto también les ocurrió a los pastores ≠Aonin (Topnaar) Nama, que han vivido a orillas del río Kuiseb y en la región de Gobabeb por generaciones[6]. Hubo un interés particular en los impactos, los factores de riesgo y la tasa de mortalidad del COVID-19 entre los nativos americanos[7] en comparación con los San y los ≠Aonin, quienes parecen tener tasas de mortalidad más bajas que las de los nativos americanos.
Un informe de Amnistía Internacional de octubre de 2021[8] acusaba de discriminatoria la prestación de servicios médicos a las mujeres San Ju/’hoan y !Kung, en particular con respecto a la tuberculosis. Al parecer, las mujeres San buscan asistencia sanitaria para la tuberculosis en menor proporción que los hombres. Si bien el gobierno se mostró crítico en un principio acerca de las conclusiones del informe, el director ejecutivo del Ministerio de Salud y Servicios Sociales asistió a la presentación virtual del informe e indicó que el ministerio se comprometería con Amnistía Internacional y los hallazgos del informe[9].
En general, las mujeres y los niños indígenas se vieron más perjudicados en 2021 que en años anteriores; sin embargo, esperaban que en 2022 se produzca un cambio más positivo en su bienestar.
Cuestiones políticas y económicas
Las cuestiones de la reforma agraria presentadas en la Segunda Conferencia Nacional de Namibia sobre la Reforma Agraria, que se llevó a cabo en octubre de 2018, se examinaron a nivel nacional y local en 2021, algunas de las cuales tenían que ver con los reclamos de tierras ancestrales de los pueblos indígenas y minoritarios[10]. Estos debates giraron en torno a los derechos sobre la tierra de las comunidades indígenas, minoritarias y marginadas, especialmente en zonas que pertenecían tradicionalmente a grupos específicos.
Namibia participó en las reuniones del Examen Periódico Universal del Consejo de Derechos Humanos en 2021[11]. Algunas de las cuestiones que se plantearon fueron los esfuerzos del Gobierno de Namibia para abordar la pobreza, la marginalización y la participación política de los pueblos indígenas y las comunidades marginadas. Representantes del gobierno y organizaciones civiles asistieron a la 20.ª Reunión Anual del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas (UNPFII) en abril de 2021, durante la cual se hicieron declaraciones sobre los problemas a los que se enfrentan los pueblos indígenas y los esfuerzos del gobierno para abordarlos[12].
La principal legislación elaborada en relación con las comunidades marginadas de Namibia, un libro blanco escrito originalmente en 2018, aún no había sido aprobada por el Gabinete de Namibia a finales de 2021. Actualmente no existe una hoja de ruta ni un cronograma para la aprobación de este documento.
En 2021, Namibia avanzó en el desarrollo de políticas sobre acuerdos de acceso y distribución de beneficios en relación con los recursos genéticos en el marco del Protocolo de Nagoya[13]. Las comunidades indígenas y minoritarias explotaron productos vegetales indígenas, como la garra del diablo (Harpagophytum procumbens), lo que generó hasta un millón de dólares namibios por área de conservación comunal. Una parte importante de estos fondos se destinó a las mujeres indígenas y de grupos minoritarios[14]. Estas mujeres consideraban que la presencia de tierras comunales cercadas era un problema importante, ya que limitaba su acceso a recursos vegetales de gran valor.
A su vez, los proyectos de huertos en el Parque Nacional de Bwabwata contribuyeron a la autosuficiencia alimentaria de los miembros de la comunidad local[15].
Las posturas locales respecto a los beneficios de la caza de trofeos en Bwabwata variaban, pero, en general, los Khwe y los Mbukushu que viven en el parque querían que las empresas que operan en Namibia compartieran más los beneficios[16].
Casos jurídicos en Namibia que involucran a las comunidades indígenas
En cuanto a los diversos casos jurídicos que las comunidades San presentaron, el Tribunal Superior analizó la apelación del caso colectivo Hai//om[17] en noviembre de 2021, aunque para finales de año no se había dictado sentencia. La apelación en el caso civil de pastoreo ilegal de Nyae seguía pendiente de audiencia a finales de 2021, y todavía no se ha dictado sentencia en el caso penal paralelo que se lleva a cabo desde hace tiempo en el tribunal de magistrados de Tsumkwe.
El cercado y el pastoreo ilegal continuaron en el área de conservación N≠a Jaqna (NJC) en 2021 a pesar de una sentencia a favor dictada por el Tribunal Supremo, para la decepción de los residentes locales[18]. La colocación de cercas en las tierras comunales en Namibia continuó siendo un gran problema en 2021[19]. Uno de los impactos es que designan zonas que están fuera del alcance de las mujeres indígenas que esperan obtener plantas silvestres, leña y otros recursos dentro de las zonas cerradas. Las mujeres indígenas corren el riesgo de sufrir maltrato si entran en estas zonas a buscar recursos silvestres. Las mujeres San !Kung y Vasekele presentaron reclamos específicos por escrito al Comité de Gestión del Área de Conservación N≠a [20].
En mayo de 2021, Alemania reconoció y se disculpó por el genocidio que ocurrió entre 1904 y 1908 en lo que era el África Sudoccidental Alemana (actual República de Namibia). El gobierno colonial alemán mató a 80.000 personas Herero y Nama durante el genocidio, el primero del siglo XX. Algunos representantes de los pueblos Herero y Nama argumentaron que no se les consultó lo suficiente durante las negociaciones entre Alemania y el Gobierno de Namibia. También argumentaron que los 1.340 millones de USD que Alemania se ha comprometido a destinar a proyectos de desarrollo social en Namibia no equivalen a pagar reparaciones directamente a las familias de los asesinados[21].
Exploración petrolera y sus repercusiones en Namibia
En 2021 surgieron preocupaciones particulares respecto a las exploraciones de petróleo y gas a cargo de una empresa petrolera canadiense, Reconnaissance Energy Africa (ReconAfrica). La empresa estaba empleando técnicas de fracking (fracturación hidráulica) en el norte del Parque Nacional de Khaudum, en las regiones occidental y oriental de Kavango[22]. Los indígenas y otros habitantes de la zona expresaron su preocupación por el posible descenso del nivel freático y la pérdida de valiosos productos de la fauna y la flora silvestres como consecuencia de las operaciones de extracción de petróleo. La empresa alegó que sus operaciones beneficiarían a la población local, pero las cifras de empleo de los miembros de la comunidad, especialmente de las mujeres indígenas, revelaron que se empleaba principalmente a hombres y que el número era mucho menor del prometido[23]. Aunque muchos pueblos indígenas y comunidades locales de Namibia y de la zona de perforación expresaron su preocupación, algunos representantes de la comunidad apoyaron públicamente el proyecto.
Mientras tanto, siguen las actividades de exploración en la región oriental de Kavango: se perforaron dos pozos de prueba y se realizaron consultas públicas, aunque estas fueron fuertemente criticadas[24]. ReconAfrica ha emprendido una entusiasta campaña publicitaria dirigida a los accionistas con lemas que la definen como una “oportunidad millonaria”[25].
En mayo de 2021, un denunciante anónimo envió un informe a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos y a la Comisión de Valores de la Columbia Británica en el que alegaba que “para subir los precios de las acciones, ReconAfrica ha violado las leyes bursátiles al no revelar información crucial sobre sus planes de buscar depósitos de petróleo y gas”[26]. El denunciante compartió el informe a National Geographic y la revista publicó un artículo detallado en su número del 21 de mayo, el cual generó publicidad internacional y campañas en redes sociales en oposición al programa de perforación del Okavango[27]. Posteriormente se anunció la presentación de una demanda legal conjunta ante la Fiscalía del Distrito Este de Estados Unidos.
En octubre de 2021, el príncipe Harry, duque de Sussex, Leonardo di Caprio, Forest Whitaker y otras celebridades se unieron a indígenas locales y activistas ambientales para pedir una suspensión inmediata de las perforaciones de petróleo y gas en la cuenca del río Okavango. El príncipe Harry y Reinhold Mangundu, un activista de Namibia, escribieron en un artículo publicado en el Washington Post: “La perforación es una apuesta obsoleta que genera consecuencias desastrosas para muchos, e increíbles riquezas para unos cuantos poderosos” y pidieron a los lectores que se les unieran en la oposición a la perforación del Okavango[28].
En noviembre de 2021, la comisión parlamentaria permanente de recursos naturales de Namibia criticó a la junta de tierras comunales de la región oriental de Kavango y a ReconAfrica por la falta de un permiso de arrendamiento en la zona de perforación[29]. Las preguntas sobre el alcance de las reservas de petróleo y el posible uso de la fracturación hidráulica en caso de que continué la extracción, seguían sin responderse a finales de 2021.
El activismo de las comunidades indígenas y marginadas aumentó en 2021, especialmente ante los desafíos que presentó la pandemia de COVID-19, así como las cuestiones que han surgido sobre los derechos de los pueblos indígenas a la tierra y los recursos en los debates sobre los impactos de la reforma agraria y los reasentamientos en varias partes del país.
Robert K. Hitchcock es un profesor de Antropología de la Universidad de Nuevo México en Albuquerque (Nuevo México, Estados Unidos). También es miembro de la Junta Directiva del Kalahari Peoples Fund. Contacto: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Ben Begbie-Clench es un consultor independiente y ha realizado un extenso trabajo sobre los problemas de los San en el sur de África. Contacto: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.
Este artículo es parte de la 36ª edición de El Mundo Indígena, un resumen anual producido por IWGIA que sirve para documentar e informar sobre los desarrollos que han experimentado los pueblos indígenas. La foto de la publicación muestra mujeres indígenas que se ponen de pie y asumen el mando en la lucha por los derechos territoriales de su comunidad en Jharkhand, India. Fotografiada por Signe Leth, es la portada del Mundo Indígena 2022 donde originalmente está escrito este artículo. Encuentra El Mundo Indígena 2022 completo aquí
Notas y referencias
[1] Informe de fin de año del Kalahari Peoples Fund. 2021 Beaufort, Carolina del Sur: KPF.
[2] Shiimi, Ipumbu. 2021a. Declaración presupuestaria sobre el año fiscal 2021-22, “Boosting Resilience and Recovery” (Estimulación de la resiliencia y la recuperación). Windhoek: Gobierno de Namibia, 18 de marzo de 2021. I. Shiimi, Ipumbu. 2021b Discurso de política presupuestaria intermedia sobre el año fiscal 2021-22, Windhoek: Gobierno de Namibia, 3 de noviembre de 2021.
[3] Mwetulundila, Paulus. “Gender Perspectives in Namibia’s Communal Land: Exploring Women’s Hindrances to Equitable Land Ownership” (Perspectivas de género en las tierras comunales de Namibia: análisis de los obstáculos a la titularidad equitativa de tierras a las que se enfrentan las mujeres). Journal of Asian and African Studies, junio de 2021, DOI:00219096211020486
[4]Angula, Margaret Ndapewa, Immaculate Mogotsi, Selma Lendelvo, Karl Mutani Aribeb, Aina-Maria Iteta y Jessica P. R. Thorn. “Strengthening Gender Responsiveness of the Green Climate Fund Ecosystem-Based Adaptation Programme in Namibia” (Fortalecimiento de la capacidad de respuesta al género del Programa de Adaptación Basada en Ecosistemas del Fondo Verde para el Clima). Sustainability 2021, 13, 10162. doi.org/10.3390/su131810162
[5] Balvedi Pimentel, Gabriela y María Victoria Cabrera Ormaza. The impact of COVID-19 on indigenous communities: Insights from the Indigenous Navigator (El impacto de la COVID-19 en las comunidades indígenas: Consideraciones desde el Navegador Indígena). Copenhague: Grupo de Trabajo Internacional para Asuntos Indígenas (IWGIA) y Ginebra: Organización Internacional del Trabajo (OIT), 2021.
[6] S. Sullivan, comunicación personal, 2021.
[7] Leggatt-Barr, Katherine, Fumiya Uchikoshi y Noreen Goldman. COVID-19 risk factors and mortality among Native Americans (Los factores de riesgo de la COVID-19 y la mortalidad entre los nativos americanos). Demographic Research 45 (2021):1185-1218. https://www.demographic-research.org/volumes/vol45/39/default.htm
[8] Amnistía Internacional. Namibia: Discrimination deprives Indigenous San people of the right to health as TB poses serious risk to their lives (La discriminación priva a los San de su derecho a la salud mientras que la tuberculosis presenta un serio riesgo a sus vidas). Amnistía Internacional, 6 de octubre de 2021. https://www.amnesty.org/en/latest/news/2021/10/namibia-discrimination-deprives-indigenous-san-people-of-the-right-to-health-as-tb-poses-serious-risk-to-their-lives/. Amnistía Internacional. “We don’t feel well-treated”: Tuberculosis and the Indigenous San Peoples of Namibia (“No sentimos que nos traten bien”: la tuberculosis y los pueblos indígenas San de Namibia). Londres: Amnistía Internacional, 2021. https://www.amnesty.org/en/wp-content/uploads/2021/10/AFR4247842021ENGLISH.pdf
[9] Windhoek Express (WE). “Grim Amnesty report attracts government attention” (Sombrío informe de Amnistía Internacional llama la atención del gobierno). Windhoek Express, 7 de octubre de 2021. https://www.we.com.na/news/grim-amnesty-report-attracts-government-attention2021-10-07
[10] Odendaal, Willem y Paul Hebinck. “’We Want Our Land Back…..’ A Socio-legal Analysis of the Etosha Ancestral Land Claim” (“Queremos que nos devuelvan nuestra tierra...” Un análisis sociojurídico del reclamo de la tierra ancestral Etosha]. En Land Tenure Challenges in Africa: Confronting the Land Governance Deficit (Desafíos en la tenencia de la tierra en África: confrontación al déficit en la gobernanza de la tierra). Editores: Hormon Chitonge y Ross Harvey, págs. 267-285. Cham: Springer International Publishing, 2021.Odendaal, Willem y Paul Hebinck. “A Socio-legal Analysis of the Complexity of Litigating Ancestral Land Rights” (Un análisis sociojurídico sobre la complejidad de litigar derechos de tierras ancestrales). En Land Tenure Challenges in Africa: Confronting the Land Governance Deficit (Desafíos de la tenencia de la tierra en África: confrontación al déficit en la gobernanza de la tierra). Editores: Hormon Chitonge y Ross Harvey, págs. 247-265 Cham: Springer International Publishing.
[11] Naciones Unidas. Consejo de Derechos Humanos. Informe nacional presentado en consonancia con el párrafo 5 del anexo de la resolución 16/21 del Consejo de Derechos Humanos. Examen Periódico Universal: Namibia. 2021. https://digitallibrary.un.org/record/3904381
[12]Informes de la 20.ª sesión del UNPFII: del 19 al 30 de abril de 2021, Namibia. https://www.un.org/development/desa/indigenouspeoples/unpfii-sessions-2/unpfii-20th-session.html
[13] J. Hazam y J. Mendelsohn, comunicaciones personales, 2021.
[14] Wiessner, P. Traditions and Transition Fund Annual Report (Informe anual del Fondo de Tradiciones y Transición). Salt Lake City: Traditions and Transitions Fund (Fondo de Tradiciones y Transición), 2021. Selma Lendelvo, Dave Cole, Wendy Viall, comunicaciones personales, 2021.
[15] Heim, Anita. “Food Environment Research among an Indigenous Community in Namibia – A New Approach to Explore Food Security of Rural People in Developing Countries” (Investigación sobre el entorno alimentario entre las comunidades indígenas de Namibia. Un nuevo enfoque para analizar la seguridad alimentaria de los pueblos rurales en los países en desarrollo). Journal of Hunger & Environmental Nutrition 16 (2021): 809-828. https://www.tandfonline.com/doi/full/10.1080/19320248.2019.1649780
[16] Thomsen, Jennifer Marie, Selma Lendelvo, Katherine Coe y Melanie Rispel. “Community perspectives of empowerment from trophy hunting tourism in Namibia’s Bwabwata National Park” (Perspectivas comunitarias de empoderamiento del turismo de caza de trofeos en el Parque Nacional Bwabwata de Namibia). Journal of Sustainable Tourism 30 (2021): 223-239. DOI: 10.1080/09669582.2021. 1874394
[17] Odendaal, Willem y Paul Hebinck. “’We Want Our Land Back…’’ A Socio-legal Analysis of the Etosha Ancestral Land Claim” (“Queremos que nos devuelvan nuestra tierra...” Un análisis sociojurídico del reclamo de la tierra ancestral Etosha). En Land Tenure Challenges in Africa: Confronting the Land Governance Deficit (Desafíos de la tenencia de la tierra en África: confrontación al déficit en la gobernanza de la tierra). Editores: Hormon Chitonge y Ross Harvey, págs. 267-285. Cham: Springer International Publishing, 2021.
[18]Datos del área de conservación N⧧a Jaqna y de los Comités de Gestión Forestal de M’kata y del área de conservación N⧧a Jaqna, 10 de diciembre de 2021
[19]Van Der Wulp, Christa y Paul Hebinck. “Fighting fences and land grabbers in the struggle for the commons in Na Jaqna, Namibia” (Batalla contra los cercos y los acaparadores de tierras en la lucha por los bienes comunes en Na Jaqna, Namibia). African Affairs, 120 (2021). 417-443.
[20]Comité de Gestión del Área de Conservación N≠a Jaqna, comunicaciones personales, 2021.
[21] Human Rights Watch. “World Report 2022: Events of 2021” (Informe mundial 2022: Acontecimientos de 2021). Nueva York: Human Rights Watch, 2022. https://www.hrw.org/world-report/2022
[22] Stanford-Xosei, Esther. ReconAfrica; Ecocide in the Kavango Basin (ReconAfrica; ecocidio en la cuenca del Kavango). Stop Ecocide Foundation, 7 de octubre de 2021. https://www.stopecocide.earth/guest-blog/reconafrica-ecocide-in-the-kavango-basin. Barbee, Jeffrey y Lara Neme. “Oil Company Accused of drilling in African Wildlife Reserve, offering Jobs for Silence” (Compañía petrolera es acusada de perforar dentro de la Reserva de Vida Silvestre Africana y ofrece trabajos a cambio de silencio). National Geographic Wildlife Watch, 13 de diciembre de 2021.
[23] Datos de las fundaciones Namibia Nature Foundation (NNF), Nyae Nyae Development Foundation of Namibia (NNDFN), Desert Research Foundation of Namibia (DRFN) y la organización Integrated Rural Development and Nature Conservation (IRDNC), diciembre de 2021.
[24] Tan, Jim. “Growing concern over Okavango oil exploration as community alleges shutout” (Creciente inquietud respecto a la exploración petrolera de Okavango mientras la comunidad alega ser excluida). Mongabay, 22 de marzo de 2021. https://news.mongabay.com/2021/03/growing-concern-over-okavango-oil-exploration-as-community-alleges-shutout/
[25] Neme, Laurel y Jeffrey Barbee. “Oil exploration company in Okavango wilderness misled investors, complaint to SEC says” (La compañía de exploración petrolera en la región natural del Okavago engañó a los inversores, de acuerdo con una reclamación presentada al SEC). National Geographic, 21 de mayo de 2021. https://www.nationalgeographic.com/animals/article/oil-exploration-company-in-okavango-wilderness-misled-investors-sec-complaint-says. Viceroy Research Group. “ReconAfrica–No Oil?” (ReconAfrica: ¿no hay petróleo? A explotar acciones). Twitter, 24 de junio de 2021. https://twitter.com/viceroyresearch/status/1408130622145515521
McGee, Niall. “‘Phenomenal riches’: Inside ReconAfrica’s aggressive stock promotion campaign” (Riquezas fenomenales: al interior de la agresiva campaña de promoción de acciones de ReconAfrica). The Globe and Mail, 20 de junio de 2021. https://www.theglobeandmail.com/business/article-an-exceptional-play-inside-reconafricas-stock-promotion-campaign/
[26] Wall Street Journal, 5 de mayo de 2021.
[27] Barbee, Jeffrey y Lara Neme. “Oil Company Accused of drilling in African Wildlife Reserve, offering Jobs for Silence” (Compañía petrolera es acusada de perforar dentro de la Reserva de Vida Silvestre Africana y ofrece trabajos a cambio de silencio). National Geographic, 13 de diciembre de 2021. https://www.nationalgeographic.com/animals/article/oil-company-reconafrica-accused-of-drilling-in-african-wildlife-reserve
[28] Duque de Sussex, príncipe Harry y Reinhold Mangundu. “Opinion: Protect the Okavango River Basin from corporate drilling” (Opinión: Protejamos la cuenca del río Okavango de las perforaciones corporativas). Washington Post, 14 de octubre de 2021
[29] Shipepo, T. “ReconAfrica operated without land certificate” (ReconAfrica operaba sin un certificado de la tierra). The Namibian, 24 de noviembre de 2021. https://www.namibian.com.na/6215654/archive-read/ReconAfrica-operated-without-land-certificate
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