El Mundo Indígena 2022: Rapa Nui (Isla de Pascua)
Durante el 2021, el pueblo Rapa Nui ha continuado enfrentando la situación pandémica que afecta al mundo. Mediante la prudencia y el uso de sus conocimientos tradicionales, ha logrado mantener su isla libre de Covid-19 gracias a la decisión de sus autoridades de tener el aeropuerto cerrado (única forma de entrada a la isla), sin vuelos comerciales.
Durante febrero principalmente, mediante un movimiento autoconvocado de mujeres rapanui, el pueblo levantó una serie de exigencias para evitar que las autoridades nacionales dieran curso al ingreso de turistas a su territorio.
La decisión de optar por la salud de su población ha traído como consecuencia inevitable enfrentar la crisis económica que implica cerrar el turismo, principal actividad de la isla, y que en condiciones prepandémicas implicaba un flujo de más de 120.000 turistas al año.
Lo anterior ha resultado principalmente complejo para la situación de la comunidad indígena Ma’u Henua, entidad rapanui encargada de la administración del Parque Nacional Rapa Nui, y de cuyos ingresos dependían cientos de personas de su pueblo.
Para sopesar dichas dificultades y el masivo desempleo, al igual que durante el 2020, la Municipalidad de Rapa Nui ha llevado a cabo un exitoso programa de generación de empleos de emergencia y conservación territorial basado en cinco ejes: impulsar la seguridad alimentaria, renovar y mantener espacios públicos, resguardar y promover los valores culturales, apoyar a emprendedores, mentores y contratistas locales y fortalecer el Sistema de Información, Seguridad y Protección Social. Mediante el programa se ha ayudado a más de 800 familias que han perdido sus ingresos producto de la crisis.
La crisis socio-económica se ha visto fuertemente agravada producto del encarecimiento del transporte de carga aérea por parte de la única aerolínea que opera en Rapa Nui, y que desde el segundo semestre se ha limitado a enviar un vuelo de carga semanal. Esta situación ha elevado tremendamente los precios de los productos, lo cual, sumado a la falta de ingresos, ha perjudicado a gran parte de la comunidad. Cabe destacar que el Gobierno de Chile se ha negado a enviar alimentos o subsidios para abastecer al pueblo Rapa Nui, pese a las varias solicitudes que han realizado los líderes locales.
En este contexto, también se ha solicitado al Estado de Chile la facilitación de aviones de la fuerza aérea para trasladar a las personas que necesitan viajar al continente y volver al territorio, principalmente por razones de salud, pero no se ha recibido una respuesta positiva.
Por su parte, durante julio de 2021, Chile ha iniciado un inédito proceso de redacción de una nueva Constitución, cuyo trabajo se ha encargado a la Convención Constitucional, órgano que deberá elaborarla dentro del plazo de nueves meses, prorrogables por tres meses más (un año en total). La nueva Constitución deberá ser ratificada mediante un plebiscito a nivel nacional.
Este órgano de 155 miembros tiene como principal característica estar conformado de manera paritaria y contar con 17 escaños reservados para representantes de los 10 pueblos indígenas reconocidos en Chile. Uno de ellos corresponde a la representante electa del pueblo Rapa Nui.
Bajo la Constitución actual de Chile, el territorio de Rapa Nui (Isla de Pascua) se encuentra protegido mediante una disposición especial en su artículo 126 bis. Ante la inminente posibilidad de que dicha norma desaparezca, durante el último semestre del año, el pueblo Rapa Nui, mediante la participación de sus líderes, lideresas y principales órganos tradicionales, ha iniciado un trabajo para consensuar una propuesta normativa. El objetivo es plantear a la Convención Constitucional un articulado que siente las bases para el cumplimiento por parte del Estado de las demandas históricas del pueblo Rapa Nui, que se basan primeramente en el reconocimiento y cumplimiento por parte de Chile del tratado internacional denominado Acuerdo de Voluntades. El acuerdo fue suscrito por la nación Rapa Nui y el Estado de Chile el 9 de septiembre de 1888, en virtud del cual comienza la relación de Rapa Nui con Chile y que representa el fundamento jurídico del vínculo que existe entre ambos.
El contenido del Acuerdo de Voluntades tiene cuatro ejes fundamentales: la cesión por parte del pueblo Rapa Nui de la soberanía sobre la isla; a cambio se establece la obligación del Estado de Chile de respetar las investiduras de que gozaban los jefes ancestrales, esto se traduce en respetar su autogobierno y autonomía sobre la isla; el derecho de propiedad colectiva sobre toda la tierra se reserva en manos del pueblo Rapa Nui; y finalmente Chile se compromete a proteger y dar bienestar y desarrollo a los habitantes de Rapa Nui, actuando como “Amigo del lugar” (Repahoa).
A su vez, el pueblo Rapa Nui demanda el reconocimiento de su calidad de Territorio no Autónomo, en los términos del capítulo XI de la Carta de Naciones Unidas, y de las resoluciones 1514 y 1541 de su Asamblea General, lo que le otorga el derecho de ser objeto de un proceso de descolonización y de ejercer plenamente su libre determinación.
Benjamin Ilabaca D. es abogado rapanui, miembro de la Secretaría Técnica de Participación y Consulta Indígena de la Convención Constitucional de Chile, director jurídico de la Municipalidad de Rapa Nui y asesor jurídico del Parlamento Rapa Nui.
Este artículo es parte de la 36ª edición de El Mundo Indígena, un resumen anual producido por IWGIA que sirve para documentar e informar sobre los desarrollos que han experimentado los pueblos indígenas. La foto de la publicación muestra mujeres indígenas que se ponen de pie y asumen el mando en la lucha por los derechos territoriales de su comunidad en Jharkhand, India. Fotografiada por Signe Leth, es la portada del Mundo Indígena 2022 donde originalmente está escrito este artículo. Encuentra El Mundo Indígena 2022 completo aquí
Etiquetas: Derechos Humanos