El Mundo Indígena 2022: Polinesia Francesa

Escrito en 03 Mayo 2022. Publicado en Mā'ohi Nui (Polinesia Francesa)

Habiendo sido antiguamente una colonia de Francia, Polinesia Francesa es una colectividad de ultramar de ese país desde el 2004. Como tal, goza de una autonomía política relativa dentro de la República Francesa a través de sus propias instituciones locales: el Gobierno y la Asamblea de la Polinesia Francesa. Actualmente, la población de la Polinesia Francesa es de 278.000 habitantes, de los cuales, el 80 % son polinesios^[1]. El balance demográfico de 2020 ilustra una ralentización en el crecimiento poblacional debido a la emigración, el declive en la tasa de natalidad –la tasa de fecundidad para 2020 se mantuvo en 1.7 hijos por mujer– y el envejecimiento de la población^[2]. La Polinesia Francesa está caracterizada por una creciente desigualdad social, tal como fue subrayado por el Instituto de Estadísticas de la Polinesia Francesa. Sus censos –en particular el censo de presupuesto familiar de 2015– demuestran que las desigualdades de ingreso son mayores en la Polinesia Francesa que en la Francia metropolitana. La situación puede explicarse en gran medida “por los limitadísimos esfuerzos redistributivos del sistema fiscal polinesio” ^[3], esto es, por la ausencia de un impuesto sobre la renta. Al momento del censo, un quinto de la población polinesia estaba viviendo bajo la línea de pobreza^[4].

La Polinesia Francesa ha estado históricamente caracterizada por una vida política polarizada con, por un lado, el partido proindependentista Tavini Huiraatira dirigido por Oscar Temaru, y por el otro, el partido autonomista Tahoera'a Huiraatira de Gaston Flosse, el cual aboga por mantener a la Polinesia Francesa dentro de la República Francesa. En 2016, una crisis de sucesión dentro del Tahoera'a, seguida de la inelegibilidad de Gaston Flosse para presentarse a las elecciones^[5], condujo a la creación de un tercer partido político, el Tapura Huiraatira. Este partido autonomista fue creado en 2016 por Édouard Fritch, presidente de la Polinesia Francesa desde septiembre de 2014 y reelecto en las elecciones regionales de abril-mayo de 2018. Estos resultados son regularmente citados por los representantes electos de Tapura para recordarle a los representantes franceses o a la ONU que, si bien estas elecciones no tienen el peso de un referéndum sobre la autodeterminación, sí enfatizan el bajo número de votos con los que cuentan aquellos en favor de la independencia. Sin embargo, desde hace unos meses el Tapura –que en octubre de 2021 respaldó a Emmanuel Macron para las elecciones presidenciales francesas de 2021– ha sido abatido por renuncias de sus políticos, revelando fuertes tensiones internas dentro de este nuevo partido político^[6].

Este artículo es parte de la 36ª edición de El Mundo Indígena, un resumen anual producido por IWGIA que sirve para documentar e informar sobre los desarrollos que han experimentado los pueblos indígenas. La foto de la publicación muestra mujeres indígenas que se ponen de pie y asumen el mando en la lucha por los derechos territoriales de su comunidad en Jharkhand, India. Fotografiada por Signe Leth, es la portada del Mundo Indígena 2022 donde originalmente está escrito este artículo. Encuentra El Mundo Indígena 2022 completo aquí

La ONU y el derecho a la autodeterminación

La Polinesia Francesa ha estado en la lista de la ONU de Territorios No Autónomos (TNA) desde mayo de 2013. Mientras que los opositores de dicha reinscripción perciben este hecho como una vía implícita de demandar la independencia, sus promotores señalan que la reinscripción en la lista de TNA debería conducir a la organización de un referéndum de autodeterminación, brindando la posibilidad a los polinesios de elegir entre la departamentalización, la independencia y la asociación (Estado asociado). Hasta 2019, el Estado francés no había cooperado con el Cuarto Comité de la Asamblea General de la ONU, responsable de asuntos de colonización, por considerar a “la cuestión francopolinesa” un asunto doméstico. Lo anterior había dejado a Édouard Fritch la tarea de solicitar solemnemente el retiro de la Polinesia Francesa de la lista de Territorios No Autónomos en octubre de 2019 y octubre de 2020. Sin embargo, en la reunión de octubre de 2020, el representante permanente de Francia ante las Naciones Unidas sí intervino ante este Comité por primera vez para solicitar que esta inscripción fuese revisada. Esta intervención del Estado francés fue interpretada por Tavini como un avance diplomático tras siete años de su política de “silla vacía”, dado que fue la primera ocasión en que un representante de Francia se pronunciaba oficialmente sobre la cuestión polinesa^[7].

En octubre de 2021, ante la ausencia de representantes del Estado, Édouard Fritch no renovó su solicitud para anular la inscripción, considerando que era demasiado difícil detener el proceso^[8]. Sin embargo, Fritch sí defendió públicamente el estatus de la Polinesia Francesa, la cual, según sus palabras, goza de “una amplia autonomía, incluyendo autonomía fiscal (y) lleva las riendas de su propio desarrollo socioeconómico”. La Polinesia Francesa, agregó, “no vive bajo una situación de opresión, ni de depredación de su riqueza”; no “es una 'colonia' que necesite descolonizarse, ni la independencia es el único camino o el 'milagro' que traerá la felicidad al pueblo; la dignidad de un pueblo no se construye necesariamente sobre la independencia”^[9].

Édouard Fritch también enfatizó el apoyo del Estado francés durante la pandemia de COVID-19 en términos de personal médico, vacunas y apoyo financiero. Sin embargo, miembros de Tavini señalaron que la gestión conjunta de la pandemia por el Estado francés y la Polinesia Francesa había ilustrado el desbalance en las relaciones entre los dos y los límites de la autonomía del territorio. Tal como señaló Chantal Galenon: “Cada semana se organiza una conferencia de prensa por el Alto Comisionado Francés, quien decide si cerrar las fronteras o reabrirlas, o si implementar restricciones sanitarias, mientras que nuestro presidente local no es más que un portavoz”^[10]. Finalmente, Carlyle Corbin, el experto independiente del Comité Especial de Descolonización de la ONU, recordó que la situación estatutaria de la Polinesia Francesa no cumple con el criterio para convertirse en un territorio autogobernado de acuerdo con la Carta de las Naciones Unidas:

Sólo un verdadero proceso de descolonización con el seguimiento de las Naciones Unidas permitirá a un territorio transitar hacia la verdadera autonomía (...). La Asamblea General ha aprobado nueve resoluciones sobre Polinesia Francesa desde 2013. Sin embargo, a lo largo de 2021, el poder administrativo no ha comunicado ninguna información a la Secretaría General, tal como lo requiere la Carta de las Naciones Unidas. Esta falta de cooperación puede obstaculizar el proceso de descolonización^[11].

Las consecuencias de las pruebas nucleares

El reconocimiento de las consecuencias de las pruebas nucleares y la dificultad de compensar a las víctimas de estas pruebas, ocupó una vez más la primera plana de las noticias políticas polinesias^[12]. El libro Toxique. Enquête sur les essais nucléaires français en Polynésie (Tóxico: investigación sobre las pruebas nucleares francesas en Polinesia), publicado en marzo de 2021, recuerda los peligros de las pruebas nucleares, enfocándose particularmente en las consecuencias de las pruebas atmosféricas conducidas entre 1966 y 1974. Los dos autores, Sébastien Philippe ( investigador de la Universidad de Princeton especializado en energía nuclear militar) y Tomas Statius  (periodista del medio de comunicación investigativo Disclose), concluyeron en lo particular, a partir de un análisis de 2000 páginas de documentos desclasificados por el Ministerio de la Defensa en 2013, que el alcance de la contaminación había sido minimizado: “Nuestras conclusiones apuntan hacia omisiones significativas en los cálculos de la CEA (la Comisión de Energía Atómica de Francia) (...) particularmente en los reportes meteorológicos, dirigidos a reducir el rango o la dirección de los efectos colaterales”. En 1974, la prueba Centauro alcanzó Tahití, afectando a 110.000 habitantes^[13]. En forma paralela, las personas que padecen de enfermedades inducidas por la radiación suelen tener problemas estableciendo la conexión causal entre sus enfermedades y las pruebas nucleares, y por lo tanto, suelen tener dificultades adicionales exigiendo compensaciones.

En junio de 2021, el diputado proindependentista Moetai Brotherson introdujo una propuesta de ley ante la Asamblea Nacional dirigida a mejorar el proceso de compensación para víctimas de las pruebas nucleares –actualmente regulado por la Ley Morin– y aumentar el monitoreo de los arrecifes contaminados de Hao, Moruroa y Fangataufa. La ley no fue aprobada. En cambio, el gobierno francés prefirió organizar una mesa redonda en el Palacio Elíseo a finales de junio de 2021 sobre las consecuencias sanitarias de las pruebas nucleares. Esta conferencia, Reko Toka, fue organizada con la asistencia del ministro de Salud, Olivier Véran, y el ministro de Ultramar, Sébastien Lebranchu, pero sin los representantes electos proindependentistas y sin las dos principales asociaciones de víctimas de pruebas nucleares Moruroa e Tatou y Association 193, quienes boicotearon la conferencia. Resultaba previsible que no iba a haber ninguna declaración o anuncio importante en esta conferencia, dado que el ministro Delegado de Antiguos Combatientes y Víctimas de Guerra “se rehusó a reconocer las mentiras del Estado y rechazó cualquier idea de un perdón oficial por parte de Francia”^[14]. A pesar del fracaso de esta conferencia, que no resultó en ningún progreso significativo, Édouard Fritch, no obstante, sacó dos importantes conclusiones: el director de la CEA confirmó que había personas que habían sido irradiadas no sólo en las Islas Tuamotu, sino también en las Islas Windward, y el gobierno francés ahora estaba considerando reembolsar al BPS –la organización local de seguridad social– por sumas de dinero empleadas en los tratamientos de personas que padecen de enfermedades inducidas por la radiación^[15].

La visita del presidente de la República, Emmanuel Macron, a la Polinesia Francesa entre el 24 y el 28 de julio de 2021 fue precedida por dos grandes manifestaciones antinucleares que concentraron entre 2.000 y 4.000 personas en Papeete el 2 y 17 de julio de 2021. Estas protestas, organizadas bajo la iniciativa conjunta de Tavini, las asociaciones de apoyo a víctimas de las pruebas nucleares y la Iglesia Protestante de Mā’ohi, pusieron en primera plana el sufrimiento de las familias que están batallando para obtener compensaciones tras el fallecimiento de víctimas, y el hecho de que la naturaleza transgeneracional de las enfermedades inducidas por la radiación ahora parece ser una cuestión a tomar en cuenta (es decir, que éstas pueden ser transmitidas de padres a hijos). En su muy esperada intervención sobre la cuestión de las pruebas nucleares, Emmanuel Macron no ofreció ninguna disculpa ni pidió perdón sino que “aceptó” este pasado nuclear y reconoció: “La nación tiene una gran deuda con la Polinesia Francesa. Dicha deuda es por haber realizado estas pruebas, particularmente entre 1966 y 1974, de las cuales no puede decirse que hayan sido limpias”^[16]. Declaró que quería la “verdad” y “transparencia” sobre las pruebas nucleares y esperaba que las víctimas recibieran mejores compensaciones, sin especificar las acciones prácticas que serían tomadas para alcanzar este fin. El discurso del presidente se enfocó en el rol que Francia pretende jugar en el Pacífico para combatir la influencia de China^[17].

Un año marcado por la pandemia

El año 2021 estuvo marcado, como en otros lugares en el mundo, por la pandemia de COVID-19, la cual afectó severamente la vida económica, política, cultural y social de la Polinesia Francesa. Hubo 43.374 infecciones relacionadas al COVID-19 y 636 muertes en 2021. La mayoría de las muertes ocurrieron en agosto de ese año, durante el cual la Polinesia Francesa registró 460 muertes adicionales^[18] y experimentó una de las mayores tasas de mortalidad en el mundo (2.800 casos por 100.000 habitantes). La explosión de casos puede explicarse, por un lado, por la baja proporción de personas vacunadas –25 % de los polinesios habían sido vacunados para inicios de julio de 2021– relacionado en parte con una desconfianza hacia las instituciones y el Estado. Entre los argumentos frecuentemente avanzados durante las manifestaciones antivacunas está la idea de que las vacunas se encuentran en una “etapa experimental”, comparable a las pruebas nucleares, y que las personas que van a ser vacunadas son “conejillos de indias”; algunos políticos también comparten esta desconfianza^[19]. El segundo motivo detrás de la explosión de casos de infección en agosto de 2021 fue el retraso en la implementación de mayores medidas de contención y las dificultades técnicas en establecer medidas de control parecidas a una tarjeta sanitaria. A pesar de que la epidemia empezó a empeorar desde inicios de julio de 2021, el comienzo del año escolar no fue pospuesto y ninguna medida de contención fue implementada hasta el 23 de agosto de 2021 (durante un mes). El alza estrepitosa de casos llevó a la saturación del Hospital Tapone en Tahití, forzando al personal de salud a ponerse en “pie de guerra”^[20] con el Gobierno de Polinesia, solicitando refuerzos humanos y materiales. La pandemia también tuvo un impacto profundo sobre las familias polinesias en duelo que fueron forzadas a organizar ceremonias funerales apresuradas y limitadas^[21].

La cuarentena y el cese de vuelos internacionales tuvieron repercusiones económicas considerables, particularmente en el sector turístico, que es uno de los más importantes de la economía polinesia: entre julio de 2020 y junio de 2021, Polinesia Francesa acogió sólo 57.000 turistas, esto es, 65 % menos que en el mismo periodo del año pasado^[22]. Durante su visita en julio de 2021, Emmanuel Macron anunció un préstamo garantizado por el Estado de 28 billones de francos CFP que sería concedido – vía la Agencia Francesa de Desarrollo– a Polinesia Francesa para ayudar a subvencionar a sus compañías en dificultades financieras, incluyendo la aerolínea Air Tahiti Nui. De hecho, la crisis de salud ha resultado en una mayor dependencia sobre el Estado francés y en mayores desigualdades sociales dentro de la Polinesia Francesa^[23].

Gwendoline Malogne-Fer es una socióloga-investigadora  del Centre Maurice Halbwachs, (CNRS/EHESS/ENS) en Paris. En 2007, publicó un libro basado en su tesis de sociología titulado ”Les femmes dans l’Eglise protestante mā’ohi. Religion, genre et pouvoir en Polynésie française” (Mujeres en la Iglesia Protestante Mā’ohi. Religión, género y poder en Polinesia Francesa). (Karthala). Su trabajo se sitúa en la intersección entre los estudios de género, la sociología del protestantismo y la antropología de la migración. Con Yannick Fer, también ha dirigido dos filmes documentales sobre demandas culturales en la Iglesia Protestante “Pain ou coco. Moorea et les deux traditions” (Pan o Coco. Moorea y las dos tradiciones) (https://www.youtube.com/watch?v=T8XXwda74vo&t=27s) y sobre los desafíos de la transmisión cultural en Polinesia Francesa “Si je t'oublie Opunohu. Les chemins de la culture à Moorea” (Si te olvido, Opunohu. Caminos de la cultura en Moorea) (https://www.youtube.com/watch?v=J9xp8JY5kmI).

Este artículo es parte de la 36ª edición de El Mundo Indígena, un resumen anual producido por IWGIA que sirve para documentar e informar sobre los desarrollos que han experimentado los pueblos indígenas. La foto de la publicación muestra mujeres indígenas que se ponen de pie y asumen el mando en la lucha por los derechos territoriales de su comunidad en Jharkhand, India. Fotografiada por Signe Leth, es la portada del Mundo Indígena 2022 donde originalmente está escrito este artículo. Encuentra El Mundo Indígena 2022 completo aquí

Notas y referencias 

^[1] ISPF. Point Etudes et Bilans de la Polynésie française, N.º1256, Bilan démographique 2020. Junio de 2021. https://www.ispf.pf/docs/default-source/publi-pf-bilans-et-etudes/1256-bilan-demographique-2020.pdf?sfvrsn=4. El último censo que señalaba categorías “étnicas” data de 1988: “Polinesios y similares” representaban el 80.58 % de la población, “Europeos y similares” el 13.28 % y “Asiáticos y similares” el 5.42%.

^[2] Ibid.

^[3] Tahiti infos del 2 de septiembre de 2019.

^[4] ISPF. Étude Budget des familles. Polynésie française 2015. Octubre de 2017. http://www.ispf.pf/bases/enquetes-menages/budget-des-familles-2015/publications.

^[5] Le Monde avec AFP.  “Gaston Flosse condamné à cinq ans d’inéligibilité pour détournement de fonds publics” “Gaston Flosse sentenciado a cinco años de inelegibilidad por malversación de fondos públicos). Le Monde, 11 de diciembre de 2020. https://www.lemonde.fr/societe/article/2020/12/11/gaston-flosse-condamne-a-cinq-ans-d-ineligibilite-pour-detournement-de-fonds-publics_6062994_3224.html.

^[6] Samoyeau, Antoine. “Tempête au Tapura” (Tormenta en Tapura). Tahiti Infos, 21 de octubre de 2021. https://www.tahiti-infos.com/%E2%80%8BTempete-au-Tapura_a204519.html.

Estas incluyen, en particular, a la diputada Nicole Sanquer y el senador Nuihau Laurey, ambos también miembros de la Asamblea de Polinesia Francesa, que abandonaron el partido en diciembre de 2019 y junio de 2020 respectivamente.

^[7] Samoyeau, Antoine. “Le Tavini ‘salue l’instauration du dialogue onusien’ avec la France” (Tavini aplaude el inicio de un diálogo de la ONU con Francia). Tahiti Infos, 6 de diciembre de 2020. https://www.tahiti-infos.com/Le-Tavini-salue-l-instauration-du-dialogue-onusien-avec-la-France_a196529.html.

^[8] Transmisión de noticias televisadas en Polynesia la 1ere el 6 de octubre de 2021.

^[9] Nations Unies. Quatrième Commission: retour des pétitionnaires, venus s’exprimer sur la décolonisation de plusieurs territoires non autonomes (Cuarta Comisión: regreso de peticionarios venidos para expresarse sobre la descolonización de múltiples territorios no-autónomos). 6 de octubre de 2021. https://www.un.org/press/fr/2021/cpsd730.doc.htm.

^[10] Samoyeau, Antoine.  “Dialogue de sourds à l’ONU” (Diáláogo de sordos en la ONU). Tahiti Infos, 6 de octubre de 2021. https://www.tahiti-infos.com/Dialogue-de-sourds-a-l-ONU_a204121.html.

^[11] Samoyeau, Antoine. ”Dialogue de sourds à l’ONU” (Diálogo de surdos en la ONU). Tahiti Infos, 6 de octubre de 2021. https://www.tahiti-infos.com/Dialogue-de-sourds-a-l-ONU_a204121.html.

^[12] Malogne-Fer, Gwendoline. “French Polynesia”. En The Indigenous World 2021, editado por Dwayne Mamo. Copenhagen : IWGIA, 2021. https://iwgia.org/en/french-polynesia/4219-iw-2021-french-polynesia.html.

^[13] Hopquin, Benoît. “Toxique. Enquête sur les essais nucléaires français en Polynésie : les mensonges de la France dans le Pacifique”. Le Monde, 6 de marzo de 2021. https://www.lemonde.fr/idees/article/2021/03/05/toxique-enquete-sur-les-essais-nucleaires-francais-en-polynesie-les-mensonges-de-la-france-dans-le-pacifique_6072003_3232.html.

^[14] Leyral, Mike. “Une table ronde sur le nucléaire pour déminer les relations entre la France et la Polynésie” (Una mesa redonda sobre la energía nuclear dirigida a despejar las relaciones entre Francia y Polinesia). Le Monde, 3 de julio de 2021. https://www.lemonde.fr/planete/article/2021/07/03/une-table-ronde-sur-le-nucleaire-pour-deminer-les-relations-entre-la-france-et-la-polynesie_6086856_3244.html.

^[15] Transmisión de noticias televisadas en Polynesia la 1ere el 2 de julio de 2021.

^[16]  “Essais nucléaires en Polynésie française: Emmanuel Macron reconnaît une ‘dette’ de la France” (Pruebas nucleares en Polinesia Francesa: Emmanuel Macron reconoce la deuda de Francia). TV5MONDE, 28 de julio de 2021. https://information.tv5monde.com/video/essais-nucleaires-en-polynesie-francaise-emmanuel-macron-reconnait-une-dette-de-la-france.

^[17] Le Monde, 30 de julio de 2021.

^[18] ISPF.  Point Etudes et Bilans de la Polynésie française, N°1277, 460 décès supplémentaires en août 2021.  Septiembre de 2021. https://www.ispf.pf/docs/default-source/publi-pf-bilans-et-etudes/1277-deces-aout-2021.pdf?sfvrsn=4.

^[19] La Dépêche de Tahiti. “2500 manifestants à Papeete contre l’obligation vaccinale” (2500 manifestantes en Papeete contra la vacunación obligatoria). Facebook, 18 de septiembre de 2021. https://fr-fr.facebook.com/LaDepecheDeTahiti/posts/6272412972798853.

^[20] Leyral, Mike. “En Polynésie, la triste réalité du tri des malades” (En Polynesia, la triste realidad de aplicar el triaje a los enfermos). Le Monde, 24 de agosto de 2021. http://planete.gaia.free.fr/microbio/virologie/corona/domtom.html#tri.

^[21] Couturier, Marine. “COVID-19: Tahiti submergé par le deuil” (COVID-19: Tahiti sobrecogido por el dolor). Libération, 3 de septiembre de 2021, https://www.liberation.fr/societe/sante/deuil-sous-covid-tahiti-submerge-20210902_OPTFZIN4M5GONKXOX43GQNLV2A/?utm_medium=Social&xtor=CS7-51-&utm_source=Twitter#Echobox=1630608108.

^[22] ISPF. “Points Conjoncture Tourisme, N.º 57,  2ème trimestre 2021”. Diciembre de 2021. https://www.ispf.pf/docs/default-source/tb-tourisme/tb-2021-t2.pdf?sfvrsn=4.

^[23] ISPF. “Point Etudes et Bilans de la Polynésie française, N.º 1199, Le quotidien des Polynésiens en confinement” (Estudios y evaluaciones de Polinesia Francesa. La vida diaria de los polinesios en la cuarentena). Abril de 2020. https://www.ispf.pf/docs/default-source/publi-pf-bilans-et-etudes/peb-04-2020-1199-confinement-2020.pdf?sfvrsn=8.

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